La inflación anualizada al tercer trimestre de 2015 cerró en 141,5 por ciento, la más elevada del mundo, y el producto interno bruto experimentó una caída de 7,1 por ciento interanual
Luego de un año de obscurantismo, el Banco Central de Venezuela desengaveta las estadísticas macroeconómicas oficiales del país. La difusión del comunicado del ente emisor fue inmediata a la presentación del decreto de emergencia económica propuesto por el gabinete ejecutivo.
A pesar de que sólo se dio a conocer el desempeño económico hasta septiembre, Venezuela hizo historia. La inflación anualizada al tercer trimestre de 2015 cerró en 141,5 por ciento, la más elevada del mundo, y el producto interno bruto experimentó una caída de 7,1 por ciento interanual, la peor desde el paro petrolero.
Solo en el tercer trimestre, el incremento de precios de alimentos y bebidas no alcohólicas fue de 55,7 por ciento, algo “injustificable” para Jesús Casique, director de la firma Capital Market Finance, quien considera que la publicación de las cifras en este momento preciso se trata de una estrategia política y confirma que Venezuela está en un proceso de estanflación económica.
La construcción fue el sector más afectado, desplomándose en 20 por ciento, este número altamente influido por la caída de 22,4 por ciento de la caída de obras del sector público. Es el mismo escenario en el que Nicolás Maduro, presidente de la República, prometió la elaboración de un millón de casas el año pasado.
La actividad petrolera se contrajo 1,9 % y la no petrolera siete por ciento. De acuerdo con el BCV, la cuenta corriente obtuvo un saldo negativo de cinco mil 50 millones de dólares y la balanza comercial registró un déficit de 782 millones de dólares.
Inexcusable -insiste el economista- por los altos ingresos que recibió el Estado tanto en el boom petrolero del período 2004-2008, que atrajo $ 291 mil 878 millones al tesoro nacional y, el caso más reciente de bonanza entre 2011 y 2014, cuando el precio del barril de petróleo se ubicaba en más de 100 dólares, recolectando 339 mil 34 millones de dólares.
Acogiendo la tesis de la guerra económica y desestabilizaciones por parte de páginas web que publican cotizaciones de divisas “sin ningún sustento”, la entidad creó el nuevo índice de “existencia de acaparamiento” y lo ubicó en 87 por ciento.
Variaciones anualizadas del INPC
2014:
I Trim: 59,3 %
II Trim: 60,5 %
III Trim: 64 %
IV Trim: 68,5 %
2015:
I Trim: 82,4 %
II Trim: 97,2 %
III Trim: 141,5 %