La joven cantante recurrió a los diseñadores de renombre para utilizar sus atuendos en la ceremonia de los Grammy
El próximo 10 de febrero se celebrará la premiación de los Grammy 2019 y Bebe Rexha está nominada a Mejor Artista Nuevo, y aunque la artista tiene más de ocho años de carrera, es predecible su emoción por la gran noche. Sin embargo, trascendió que hay un problema respecto a su esperado look.
La intérprete de 29 años se llevó una gran decepción mientras busca a un diseñador que esté dispuesto a vestirla y denunció la situación en un vídeo publicado en su Instagram, en el que explica que, como toda estrella, recurrió a marcas de gran renombre para pedir un atuendo a la medida, pero se encontró con que nadie estaba dispuesto a ocuparse de su vestuario.
{instagram}https://www.instagram.com/p/Bs58lMqHtrk/{/instagram}
“Literalmente soy demasiado grande, y si una talla seis u ocho es demasiado grande, entonces no quiero llevar sus putos vestidos”, afirma la cantante neoyorkina en el clip que utilizó para “desahogarse”, añadiendo que aceptaría el hecho de que alguien se niegue a vestirla debido a su música o estilo, pero no por su peso.
“Es una locura… Lo que están diciendo es que todas las mujeres del mundo con una talla ocho o más no son lo suficientemente guapas y no pueden llevar sus vestidos”, siguió Rexha al dirigirse a las firmas de alta costura.
Muchas estrellas buscan cambiar la perspectiva de la moda, debido a la exigencia de esta industria, cada vez más lucrativa. Tiffany Haddish, por ejemplo, aseguró que “se pondría un vestido blanco de Alexander McQueen tantas veces como pudiera”, tras pagar cuatro mil dólares por la pieza, una de las más asequibles.
Bryce Dallas Howard, protagonista de Jurassic World, llevó a los Screen Actors Guild Awards de 2017 un vestido que costaba solo 300 dólares, obtenido de la tienda Dress the Population, puesto que, según ella, el costo de los atuendos sale de su bolsillo.