305 empleados temen por sus puestos de trabajo. Los directivos alegan que se trata de una remodelación, pero la ausencia de contratistas y máquinas ponen en alerta a los empleados
“Se le informa a nuestra distinguida clientela que a partir de 11-02-2016 y hasta nuevo aviso estaremos cerrados por remodelación”, dice el cartel pegado en la entrada del supermercado Bicentenario ubicado en la avenida Fuerzas Armadas, al norte de Maracaibo. Una premisa de la que sus trabajadores dudan, pues aún no observan la presencia de contratistas o equipos para efectuar las modificaciones en la estructura.
La situación del abastecimiento en los supermercados del país genera temor en sus empleados. “Al no ver remodelación, al ver la crisis de la empresa y la falta de recursos que hay nos da la incertidumbre de qué va a pasar con nosotros en los posteriores días”, afirmó Juan Manuel Colina, miembro del sindicato de trabajadores de la tienda.
Desde que les informaron sobre la medida a través de un mensaje de texto, no han escuchado detalles por parte de la directiva del abasto. Los trabajadores expresan su preocupación pues el local en donde está establecido el supermercado es alquilado. Un rumor sobre un posible cierre en los abastos de La Fuente, Perijá y Las Mercedes en Caracas enciende las alarmas.
Son 305 empleos directos comprometidos si la sospecha es verdadera. Dubitativos asisten a cumplir su horario y tomaron la iniciativa de limpiar el establecimiento durante sus horas de trabajo. Desconocen si cobrarán su quincena y no cuentan con un documento firmado que les garantice sus puestos de trabajo.
Érica Ibarra, miembro del sindicato de trabajadores recuerda que hace un año vivieron la misma situación. El abasto bajó las santamarías por remodelación. En ese momento los empleados se opusieron a irse a sus casas a esperar la reapertura. “Dijeron que iban a remodelar la tienda, a colocar los aires, las neveras nuevas y los aires nunca llegaron. Hace más de dos años que los aires se dañaron y dicen que los trabajadores somos los culpables porque nos robamos los aires”.
Los efectos por el cierre de la sede de la red pública se hacen sentir en la zona norte. Los supermercados aledaños aumentaron considerablemente sus colas. Y es que, de acuerdo con los sindicalistas de Bicentenario de Fuerzas Armadas, diariamente recibían cerca de dos mil visitas.
Se defienden
Luego de una visita a la tienda, José Luis Acosta, vicepresidente del Consejo Legislativo del Estado Zulia señaló a los trabajadores del abasto como los culpables de su situación operativa. “Manifestó que aquí había 70 cajas disponibles y sólo había 20 cajeros en ese momento. Eso es totalmente falso, solo hay 15 cajas disponibles y funcionan ocho cajas”, dijo Aura Peña, empleada. Acosta también indicó que los trabajadores gozaban de privilegios para la obtención de alimentos, una versión que desmintió Peña. “Los trabajadores no somos culpables de que la empresa no tenga un abastecimiento suficiente para toda la colectividad”.