Vecinos de la calle 105 del sector Pomona denuncian la falta de agua. Aseguran que deben “cazarla” desde la madrugada del sábado para poder surtirse del vital líquido. Piden a las autoridades que se cumpla el esquema establecido
Los habitantes de la calle 105 del sector Pomona “cazan” el agua desde la madrugada del sábado desde hace dos meses. Para la comunidad, la búsqueda del líquido es constante y cada cinco días ruegan por camiones cisterna.
La familia de Carmen de Moreno no se da abasto. Relata que con solo un tanque de mil litros y dos pipas de agua para la semana, las seis personas que viven en su casa hacen “milagros” para sobrevivir. El reciclaje de agua se volvió el día a día para ellos. Moreno cuenta que al bañarse usan lo restante para limpiar el piso o para lavar los baños.
Con la implementación del nuevo esquema de racionamiento, de un día y seis horas con el servicio y seis días y seis horas sin él, piden a Dios cada fin de semana que no falle en llegar el suministro. La ama de casa asegura que los barrios aledaños viven la misma situación.
En la comunidad abundan las tomas ilegales, por lo que la intensidad del chorro merma y las familias se ven en la necesidad de buscar el agua directamente de la tubería principal. Carmen de Moreno dice que es normal ver a los niños con sus botellones corriendo para llenarlos, cuando hay agua.
Freddy Linares, habitante del sector, sufre las consecuencias de las tomas. Asegura ser la única persona que no recibe el servicio y depende de su vecina para llenar el tanque con una manguera. Los afectados piden a la autoridades que se cumpla el esquema prometido.