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Las marchas opositoras no cesan en Maracaibo. Ayer la meta fue llegar al Palacio de Justicia (PN) en el casco de la ciudad, donde la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la Policía Bolivariana del Estado Zulia (CPBEZ) dispersó con gases lacrimógenos a los manifestantes. Nuevamente el gas afectó a niños de las escuelas de la zona. La refriega obligó al cierre de los comercios adyacentes, lo que provocó que los buhoneros se alzaran en contra de los manifestantes.
La caminata fue en respaldo a la acción de Luisa Ortega, fiscal de la República, quien presentó un nuevo recurso contra la constituyente y las bases comiciales que la rigen. Arrancaron cerca de las 11.00 de la mañana desde la sede de los tribunales, en la avenida Bella Vista. “Queremos voto”, fue el reclamo insistente entre los manifestantes.
Exigieron referendo ante el cambio a la Carta Magna. Así avanzaban, mientras un contingente de la GNB y de la Policía regional, los esperaba en la instalación judicial. La azotea estaba plagada de uniformados, preparados con sus bombas lacrimógenas.
Los opositores pasaron por toda Bella Vista y cruzaron en la Falcón hasta llegar a Delicias, por donde caminaron hasta llegar al Palacio de Justicia. Muchos estaban encapuchados con sus franelas y con telas alusivas al tricolor venezolano. Rayaron las paredes de la infraestructura con grafiti rojo.
Juan Pablo Guanipa, diputado de la Asamblea Nacional (AN) y coordinador de Primero Justicia (PJ) en el Zulia, invitaba por megáfono a cantar el himno nacional. Las notas de la patria se vieron interrumpidas por las bombas que lanzaron desde la azotea. Comenzó la dispersión.
En defensa
Los manifestantes se defendían arrojando piedras y regresando los artefactos lacrimógenos a los efectivos. La Guardia sacó su tanqueta y una ballena. Perseguían a la gente en moto para disparar perdigones. Hubo heridos, desmayados y afectados por el humo químico, aunque no se reveló una cifra exacta.
Miembros del Equipo Cruz Verde auxiliaron a los lesionados y ayudaron a evacuar a los infantes de un preescolar en Torres del Saladillo y de la escuela básica nacional Cristóbal Mendoza, donde se desmayó una cocinera. Los niños salían llorando.
El cierre obligado de los negocios motivó a los buhoneros a revelarse en contra de los manifestantes, a quienes les tiraron piedras, aunque mediaron y los ánimos bajaron. El enfrentamiento con los uniformados se extendió por más de dos horas.
No “pisarán peine” de regionales
Ante la inscripción de candidatos en agosto para las regionales del 10 de diciembre, los dirigentes de la Unidad concordaron en que “no pisaremos ese peine”. Aseguraron que en este instante, la única organización es contra la constituyente. “No vamos a pisar ese peine de un cronograma electoral cuando se está planteando un proceso que va a acabar con la República. Tenemos que estar concentrados en sacar a Maduro por la vía constitucional y en impedir la constituyente”, dijo el diputado Guanipa al inicio de la marcha.