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En la ciudad de Nueva Jersey, EEUU, una familia decidió realizar un controversial e inesperado decorado de Halloween en su hogar, al colocar un maniquí lleno de sangre en contra de un árbol y un auto Toyota, para así simular una verdadera escena del crimen.
Krysten y Kevin Negrotto, residentes de Waretown, recibieron denuncias de sus vecinos y habitantes del pueblo, debido a la increíble escena que llamó en grande la atención de los medios de comunicación a pocos días de la festividad más celebrada en EEUU.
La pareja utilizó su propio carro para recrear la escena, aunque dijeron que sólo aflojaron el parachoques y llenaron de sangre falsa el auto para hacer más real el momento, además el muñeco lo realizaron con almohadas.