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Luego de que Joel Enrique Ruiz Pérez, de 29 años, apareciera muerto en uno de los callejones arenosos de la avenida principal del barrio Bicentenario II, parroquia Venancio Pulgar del municipio Maracaibo, el pasado jueves en la mañana, sus familiares se dirigieron hasta la morgue forense para retirar el cuerpo. La indignación de Arcila Ruiz, tía del occiso, le transfiguraba el rostro en una expresión de rabia y dolor.
Este sentimiento también era compartido por Yoselin Ruiz, hermana de Joel, quien le pidió a los detectives de la Policía científica que dieran con el paradero del asesino. La víctima estaba parada frente a la puerta de su casa cuando la vieron por última vez, aunque no tenía problemas con nadie, un delincuente lo mató para robarle las gomas y lo dejó tirado en un callejón.
Los familiares del occiso piensan que el homicidio pudo haberse producido en otro lugar porque a las 5.00 de la mañana de ese día nadie lo había visto tendido, de hecho, afirmaron que los delincuentes le robaron las tarjetas bancarias y luego llamaron por teléfono para exigir las claves.