
Cuatro
“Estamos en contra de la tala de árboles”, afirmó Henry Ramírez, presidente del Instituto Autónomo Regional del Ambiente (IARA), al referirse al árbol de ceiba que fue envenado en el sector Nueva Vía.
Los habitantes de la comunidad denunciaron la caída del árbol el viernes a las 4.00 de la mañana, el cual cedió ante el veneno e impactó sobre cuatro casas de bloques y techos de lata dejando un saldo de tres heridos en la calle 71A con avenida 27, sector Santa María, parroquia Chiquinquirá de Maracaibo.
Ramírez aseguró que el ente no emite permisos para talar árboles porque no está permitido por la Ley Forestal, siendo únicamente el ministerio de Ambiente el encargado de autorizar el procedimiento y el Instituto Municipal del Ambiente (IMA) para aprobar la poda, “Nosotros nos encargamos de los permisos en el área rural, para las áreas urbanas el IMA y el ministerio son los órganos competentes”.
Indicó que el lunes una cuadrilla del ente acudirá para prestar apoyo social a las personas afectadas con la limpieza de los escombros. “Eso no es de nuestra competencia porque no damos ese permiso, pero vamos a ayudarlos”.
Reclamo
La comunidad acudió a los organismos consignando permisos para la tala del árbol seco. En septiembre del 2011 presentaron un oficio ante el ministerio de Ambiente el cual concedió la poda y posteriormente el IMA en noviembre del 2014 concedió nuevamente el permiso debido a que el crecimiento de las ramas afectaba las viviendas con comején y gusanos.
Eduardo Torres, vocero del consejo comunal, señaló que una de las vecinas no estuvo conforme ya que deseaba que se cortara la planta por completo y procedió a “infiltrar” personas para que colocaran veneno en la base del árbol. Acción que con el tiempo se tradujo en la muerte de la ceiba.
Los daños
Los vecinos comentan que fue “un milagro de Dios” que nadie muriera en la accidente. Marcos Barrios, afectado, relata que las cuatro familias se salvaron debido a que confundieron el sonido de la madera rompiéndose con delincuentes caminando por los techos. Indica que en el barrio tienen problemas de seguridad y se levantan en la madrugada para hacer guardia. “Todos estábamos en el patio cuando vimos la mata caer. Si hubiéramos estado dormidos nos mata”.
La comunidad agradeció la presencia de las autoridades del IARA, quienes les aconsejaron reunirse con la vecina del envenenamiento del árbol de ceiba y llegar a un acuerdo con respecto a los daños materiales ocasionados.
Por ahora las familias damnificadas esperan la colaboración de las autoridades para la reconstrucción de sus viviendas.
Jornada de limpieza
Iniciando con el operativo de limpieza el IARA procedió a desplazar cuadrillas de salserines a lo largo el sector Altos de la Vanega. Desde las 9.00 de la mañana los obreros se hicieron presentes y dejaron el área libre de desechos sólidos.