El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprobó un nuevo plan operacional de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) que alberga a la principal siderúrgica del país y ha señalado que se hará una “rigurosa planificación” en los sectores aluminio, hierro y acero, informaron hoy voceros del Gobierno
El vicepresidente venezolano, Tareck El Aissami, dijo en una conferencia de prensa que el jefe de Estado aprobó y firmó “un nuevo esquema organizacional y operacional de la CVG”, corporación que alberga una veintena de empresas.
Indicó que la Corporación será adscrita al Ministerio de Industrias y de Producción Nacional “lo que se traduce en un efectivo control de la actividad política, administrativa y operativa” de las industrias básicas de Venezuela, así como “la adecuada y transparente inversión de sus recursos”.
La CVG, fundada en 1960, está ubicada en el estado Bolívar (sureste) y sus empresas fueron nacionalizadas entre 2008 y 2009 por el entonces presidente, Hugo Chávez, mentor del actual jefe de Estado.
El Aissami dijo que esta decisión se enmarca dentro de las medidas económicas que anunció ayer el presidente que incluyen la reconversión monetaria, la eliminación de impuestos para la importación de maquinarias y materia prima para producción agropecuaria y de otros sectores, entre otras.
Diputados opositores han advertido sobre el deterioro de estas empresas que hasta la década pasada figuraron entre las más rentables del país y desde hace años registran numerosas protestas de sus trabajadores que denuncian la paralización de algunas y el menoscabo de todas.