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Tras cuatro días de reunión permanente, hoy en un acto por el revocatorio desde el Parque Miranda en Caracas, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) anuncia al país las acciones a seguir en cuanto a las condiciones impuestas por el Consejo Nacional Electoral (CNE) para la recolección del 20 por ciento. Jesús “Chúo” Torrealba, coordinador de la alianza opositora, dijo a El Nacional que no aceptarán la inconstitucionalidad de la regionalización, dejando la expectativa sobre los lineamientos puntuales que aplicarán.
Analistas concuerdan en que “es un error no ir a la jornada”. Solo la participación demostraría la debilidad del oficialismo. “La oposición debe participar. No le queda margen de maniobra. No creo que la presión de calle haga que el CNE cambie las reglas”, afirmó José Rafael Mendoza, analista político.
Señala que la posición del ente comicial no es novedosa. Son medidas que ya venían asomando, razón por la cual no considera que el anuncio haya tomado por sorpresa a la Unidad. Destaca que las reuniones permanentes denotan la dificultad de acordar sobre el riesgo de ir o no al proceso.
“La discusión de la Unidad es en base a qué podría pasar si no continúa con el revocatorio. Puede ser un golpe muy fuerte para la credibilidad de la oposición. Pudiese generar una desmovilización enorme por parte de quienes los apoyan”.
Jesús Castillo Molleda, presidente de la Fundación Zulia Productivo, apuntó que “las cartas ya están echadas. La MUD tiene que seguir el juego. Nadie dijo que iba a ser fácil. Si no se prepararon para estos anuncios, de verdad que fue una torpeza, pero rectificar es de humanos y toca hacerlo”.
Indicó que no se puede cometer el mismo error de las parlamentarias del 2005 cuando la oposición se abstuvo de participar. El resultado fue una mayoría oficialista de la que aún se ven las consecuencias.
Destacó que hay una ventaja para el 20 por ciento: La gente está molesta y esto repercutirá en un gran despliegue de votantes. Además, si no se recoge el porcentaje en todas las regiones, esto también será de estímulo, porque la ciudadanía sabrá que no es por déficit de electores, sino porque no se contó con la estructura y la organización por parte del CNE como poder institucional del Gobierno. Esta situación crearía aún más rechazo a la gestión del presidente Nicolás Maduro.
Asegura que es el momento de abrir otros frentes distintos al revocatorio, como lo son la Constituyente, reforzar el llamado a elecciones regionales, a los presos políticos, al tema económico, abastecimiento y seguridad.
Por seis millones
El analista Aníbal Sánchez aseguró que en cuanto a la factibilidad de las firmas, sí es posible seguir. Precisó que se pueden recoger seis millones de rúbricas en este 20 por ciento, más un colchón de 10 por ciento. Estimando que cada elector dure un minuto 10 segundos, se obtendrían unas mil 145 firmas por máquina que multiplicado por las cinco mil 392 que fueron asignadas en el país, resultan en seis millones 173 mil 840 voluntades, es decir, 30 por ciento. Resalta que aún en los estados más complicados con la regionalización “el descontento nacional pasa por encima de cualquier estrategia con fines desmotivadores”.