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Una maestra de Glasgow recibió una insólita sugerencia cuando consultó acerca de cómo tratar a un alumno que padecía síndrome de Asperger.
El hecho tuvo tal impacto en la comunidad educativa que llegó hasta el Parlamento británico, donde el escándalo por la falta de preparación de los profesores aumentó.
La insólita revelación fue hecha por Sylvia Haughney, representante gremial de los maestros, durante una audiencia con los parlamentarios.
La profesora contó que interrogó a un miembro del personal educativo sobre cómo había sido entrenada para tratar con un alumno con Asperger. “Me dijeron que mirara The Big Bang Theory”, fue la respuesta de la maestra.
Además de la inapropiada orden que recibió la profesional, en la exitosa seria norteamericana nunca se especifica que alguno de sus integrantes tenga este síndrome.
A quien siempre se lo señala como diagnosticado es al personaje interpretado por Jim Parsons, Sheldon Cooper, cuyo coeficiente intelectual se eleva a 187. Las relaciones sociales de este científico siempre están bajo un manto de dificultades, lo que no significa que esté bajo un espectro autista.
Los autores y guionistas de The Big Bang Theory nunca han confirmado que Sheldon sea un joven con Asperger. Oficialmente jamás se le ha hecho un diagnóstico en sus capítulos.
El propio Parsons fue interrogado alguna vez al respecto y respondió: “Es una pregunta difícil. Cuando me lo preguntaron no estaba muy seguro de qué significaba eso. Les pregunté a los autores y me dijeron que no”.
Cuando se conoció el caso, la opinión pública de Escocia se indignó por el pobre nivel de capacitación que tienen sus maestros.
Haughney explicó al Comité de Educación y Oficios que en el pasado la instrucción específica incluía “entrenamiento directo con un psicólogo y un terapista del lenguaje hablado, para darnos conocimientos y comprensión” de los estudiantes que sufren este síndrome.